Silencios
I
Mutilada de fuegos yace mi voz
y respira el sabor de la ausencia.
Inerme ante el cielo callo
mientras se sumerge en mí la oscuridad
que me absorbe.
Sepulto entre las piedras el rugir
del viento
Hasta que mi soledad sangrante desciende
gota a gota y se disuelve en el silencio.
II
Hoy, busco en el umbral
alguna palabra que desnude el frío.
siento en la lluvia, en la noche,
que un silencio de luces recorre mi cuerpo.
…Unos pasos húmedos traspasan la puerta…
y Neruda calla absorto en su olvido.
III
Sonrojada y absurda, cerrada y vacía.
Renegada de luz, redonda de estupor,
sin redención alguna.
Sembrada en palabras,
en polvo y gemidos.
Bordeada en silencio
diluida en ecos y nombres.
Esta clase de voz se cierne en mi, ahogada
en mi sangre respira,
y se esculpe en mi sombra, en el frío,
en nada.
Profecía
Se posa el ave sobre los
hombros del tiempo
sus alas negras envuelven
los ojos indescifrables.
El hombre calla
y duerme el
fulgor de su propio espanto.
Y el pájaro observa
y vuela con alma,
que ya agoniza un nuevo
festín.
Evelyn Taveras. Santiago, 1980, estudiante de Filosofía y Letras CURSA-UASD.
martes, junio 21, 2005
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1 comentario:
Hola, Bella.
De primera lectura puedo decir que tienes un gran talento y una forma auténtica de crear imágenes...Deja que esa voz tan hermosa siga traspasando los senderos de la sombra.
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